
Nuevo fin de semana de doblete, viernes Aranguren (Vizcaya) y sábado Hortaleza.
Ya había ganas de volver por Aranguren, disfrutar de las tierras del norte y reencontrarse con su gente que, una vez más, nos acogió como si desde la primera vez que estuvimos por allí no hubieran pasado más que un par de días. Saber lo que te espera allá donde vas siempre es una motivación extra para cumplir encantado con la parte de Road.
Tras un inicio de finde algo ajetreado -no es fácil compatibilizar 5 personas con sus correspondientes 5 curros y sus 5 horas de salida pertinentes- logramos ponernos en ruta. Quizá esta vez con algo mas de retraso por haber cerrado la puerta de la Delitoneta, si si si ¡Sólo por eso! … Que estuviesen las llaves dentro, en mi opinión, son detalles sin importancia (como se nota quién se las dejó).
Mismo lugar, pero distintas circunstancias. En esta ocasión compartimos el escenario con LISKER, grupo que actuó después de nosotros y en cierto modo, “culpables” de lo que se avecinaba.
El concierto como siempre, muy divertido y en muy buena compañía.
Tras el bolo tocaba cumplir con la parte mas dura (Rock): remadrugón, las horas de viaje y el desgaste del propio bolo. La tragedia acechaba...
Descripción de los hechos:
Sentados detrás del escenario (suena Lisker).
Raúl: Ufff! Que sueño tengo.
David: Pues si pues si. ¿Nos vamos a sobar?
Raúl: Va a ser que…
David: Vamos a ver a esta gente un poco y nos vamos.

“A la mañana siguiente” y con el tiempo justo salimos hacia Madrid para participar en las fiestas de Juan & Juana, organizadas por los amigos de la Unión de Hortaleza y Radio Enlace.
En esta ocasión nos tocaba cerrar la noche tras Limando el Serrucho y Kain Tubal, pero quien se encargó de cerrarla fue la lluvia (Rain). El tiempo se puso exigente y al sexto o séptimo tema del repertorio empezó a decirnos, en forma de tormenta, que el fin de semana tocaba su fin.
Pasamos un rato bajo el escenario echándonos unas risas con Robles (Radio Enlace) esperando que el cielo nos concediera algo de cuartelillo, pero nada. Sin paraguas y con todo lo encharcable encharcado decidimos que era buen momento para decir hasta luego.
¡Así son las cosas! Dos días llenos de Rock (porque siempre es duro) Roll (porque no paramos de dar vueltas) Road (los kilómetros suman y siguen) y Rain (porque nos mojamos bastante).